Gato Raza Somalí de pelo largo características y fotos
Esta hermosa raza es un descendiente de pelo largo del abisinio de pelo corto. Al principio, los criadores de abisinios rechazaron gatitos de pelo largo; Sin embargo, otras personas encontraron atractivos a estos gatos, y los criadores comenzaron a producirlos intencionalmente.
La Asociación de Aficionados de Gato de los Estados Unidos aceptó al somalí como una raza en 1979. El pelaje «marcado» del somalí viene en una variedad de colores, desde el rojo intenso, terroso al azul, y cada cabello tiene bandas de color más claro y más oscuro, y tiene una franja oscura que corre a lo largo de la espalda y la cola. Puede tomar hasta 18 meses para que un gato joven desarrolle el color completo del pelaje. La característica más llamativa del somalí es la larga cola emplumada.
El gato también tiene un collar alrededor del cuello (más completo y más pronunciado en los machos), lo que le da una apariencia regia. Animado e insaciablemente curioso, el somalí es una mascota entretenida. Aunque es muy cariñoso y familiar, generalmente no es un gato faldero; el somalí tiene demasiada energía para quedarse quieto por mucho tiempo. Su temperamento confiado hace que la raza sea ideal para el espectáculo.
- Origen: USA: 1960
- Registro de gatos: CFA, TICA, GCCF, FIFe
- peso: 3,5 – 5,5 Kg
- Varios colores, algunos con punta de plata; patrón de tortie, los pelos plateados siempre marcados.
- Ojos rodeados de un color más claro
- Capa rica de color conocida como «usual». Con un tictac distintivo
- Pelo fino con una textura muy suave
- La larga y tupida cola se asemeja a un cepillo de zorro
- hocico redondeado
- Orejas grandes y de punta redonda colocadas bien atrás en el cráneo
- Marcas oscuras en mejillas y cejas.
Cuando un gen de pelo largo apareció por casualidad en los gatos abisinios, los gatitos de pelo largo que aparecieron junto a los hermanos de pelo corto inicialmente no encontraron el favor de los criadores. No había interés en desarrollar el rasgo, y los de pelo largo fueron vendidos como mascotas. Cuando unos pocos criadores pioneros reconocieron el potencial de un nuevo gato, hicieron un lento progreso, los primeros somalíes recibieron escasa atención en las exposiciones de expositores y jueces. Pero con determinación llegó el éxito, y a partir de 1979 los somalíes lograron un reconocimiento total.