Aunque los gatos no utilicen palabras para comunicar sus pensamientos y sentimientos, tienen su propia forma de hacerlo. Y cuando un gatito está enfadado, ay de la persona que ignora esas señales y va a por una mascota.
Por si acaso, repasa las distintas formas que tienen los gatos de decirnos que están enfadados.
Gruñidos y siseos
Los gruñidos y los silbidos son las principales formas que tienen los gatos de decirnos que están enfadados. Si tu gatito gruñe o silba cuando te acercas, puedes apostar a que no está contento y preferiría que cambiaras de dirección.
Ronroneo
Vale, ésta es complicada. Los gatos ronronean sobre todo cuando están contentos y felices. Pero a veces también ronronean cuando están asustados o sufren, y algunos lo hacen cuando están enfadados. Por lo tanto, se trata de conocer al gato y leer el resto de su lenguaje corporal.
Si su gato nunca ronronea, pero de repente empieza a hacerlo mientras muestra algunas de las otras señales de lenguaje corporal de este artículo, es mejor ir sobre seguro y asumir que está enfadado.
Meneo rápido de la cola
Los gatos no suelen mover mucho la cola. La mayoría de los gatos no mueven la cola alegremente como un perro. Un movimiento rápido de la cola o una palmada suele indicar enfado felino.
Evasión
Los gatos que están enfadados con alguien suelen evitar estar cerca de esa persona. Puede que abandonen la habitación, salten del sofá o se levanten y miren fijamente al objeto de su ira desde la distancia.
Orejas echadas hacia atrás
Si un gato tiene las orejas echadas hacia atrás, es casi seguro que está enfadado. No se acerque a un gato con las orejas en esa posición.
Recuerde: Todas estas pistas del lenguaje corporal pueden significar alternativamente que un gato está asustado o molesto y no tanto enfadado. Utilice pistas contextuales y otras acciones y lenguaje corporal para ayudarle a determinar lo que su gato está intentando comunicar.
Mueca de enfado
Un gato enfadado suele hacer una especie de puchero y parecer más prominente. Se les eriza el pelo y, en general, parecen más grandes.
Movimiento
Si el resto del lenguaje corporal de un gato no es suficiente para hacer retroceder a alguien, normalmente dará un zarpazo al intruso. La excepción es que los gatos sin garras a veces se saltan ese paso y pasan directamente a morder.
Mirada fulminante
Aunque los gatos no pueden hacer todas las expresiones faciales matizadas que pueden hacer los humanos, son totalmente capaces de hacer saber a un humano que están enfadados mirándole mal. Este es un caso en el que, una vez que conoces la personalidad de un gato, te resultará más fácil reconocer cuándo te está mirando mal.