¿Por qué los perro se pegan cuando se aparean?
Si alguna vez ha intentado criar perros o incluso ha presenciado un apareamiento accidental, es posible que se haya encontrado con un suceso aparentemente extraño. Los perros parecen quedarse pegados de la cola y no pueden separarse después de mantener relaciones sexuales. Si no sabe que esto puede ocurrir, puede ser muy alarmante. Sin embargo, es algo muy común en el mundo canino. Entonces, ¿por qué los perros se quedan pegados cuando se aparean? Examinamos este singular fenómeno canino y le damos los mejores consejos de veterinarios y criadores de perros experimentados sobre lo que debe hacer al respecto.
Quedarse pegados durante el apareamiento es algo tan normal en los perros que incluso tiene su propio nombre médico. Se denomina «atadura copulatoria» y también se observa en cánidos salvajes como lobos y zorros. Se produce porque una parte del tejido eréctil de la base del pene del perro macho, el bulbo glandular, se llena de sangre. Esto ocurre después de que el pene se introduzca en la hembra y se desencadena cuando el perro macho empuja. El bulbus glandis se hincha muy rápidamente y pronto mide más de dos veces el diámetro del resto del cuerpo del pene. Como resultado, se atasca dentro de la vagina de la hembra (canal del parto).
Al mismo tiempo, los músculos circulares de la entrada de la vagina de la perra (los músculos constrictor vestibuli) se contraen e impiden que el pene vuelva a salir. El resultado es una cerradura muy segura y los perros quedan atados.
¿Qué papel desempeña el lazo copulatorio en la cría?
Para entender esto, tenemos que considerar el comportamiento normal de apareamiento en los perros. Suele empezar cuando un macho olfatea a una hembra para comprobar que está en celo y, por tanto, receptiva al apareamiento. Sin embargo, ella también puede mostrar su voluntad de aparearse presentando el trasero en dirección a él y manteniendo la cola a un lado.
Una vez que el macho la monta y comienza a empujar, tiene una primera eyaculación durante la cual su pene libera una eyaculación previa al esperma. A continuación, el bulbo glandular se hincha y los músculos constrictores del vestíbulo de la perra se contraen. Se forma así el lazo copulatorio y los perros quedan unidos. En ese momento, el macho deja de empujar y eyacula su esperma dentro de la hembra.
¿Qué aspecto tiene un lazo copulatorio?
Una vez que el macho ha eyaculado, desmonta a la hembra y se da la vuelta en un ángulo de 180 grados, de modo que los perros quedan mirando en direcciones opuestas. Sin embargo, su pene sigue «encerrado» dentro de la hembra. Parecen dos perros con el culo pegado. Suena bastante cómico, pero es muy alarmante si no lo has visto antes o no tienes ni idea de lo que es. Los perros pueden permanecer así más de media hora.
¿Por qué es necesario el lazo copulatorio en los perros?
Cada tipo de animal se ha adaptado para tener las mejores posibilidades de tener crías. Por ejemplo, las gatas se vuelven fértiles (es lo que se llama el apareamiento) cada 21 días aproximadamente. Esto les da muchas oportunidades al año de quedarse preñadas. Sin embargo, las perras sólo son fértiles dos veces al año. Es lo que se llama estar «en celo» o «en celo». Los perros tienen que aprovechar al máximo estas escasas oportunidades de aparearse. Por eso han evolucionado para tener un vínculo copulatorio.
Cuando los perros están juntos, durante y después de la eyaculación, el esperma queda atrapado en el interior de la hembra. Esto le da la mejor oportunidad de alcanzar y fertilizar el óvulo para producir una camada de cachorros.
¿Cuánto dura el vínculo copulatorio?
No en todos los apareamientos hay lazo copulatorio, o puede ser tan breve que no se note que se ha producido. Sin embargo, en la mayoría de los perros dura entre 5 y 15 minutos. En algunos casos, ha llegado a durar 45 minutos.
Para los perros que se aparean por primera vez, esto puede ser angustioso. Para otros, es lo que esperan que ocurra.
El lazo copulatorio y el embarazo
Existen muchos mitos en torno al lazo copulatorio, así que echemos un vistazo a la ciencia para conocer la verdad. Siempre que un perro macho eyacule dentro de la hembra, existe la posibilidad de que ésta quede preñada. El lazo copulatorio no es necesario, pero aumenta enormemente las posibilidades de embarazo. Por eso, los criadores lo buscan como señal de éxito en el apareamiento. También creen que cuanto más dure el lazo copulatorio, mayores serán las probabilidades de éxito. Esto tiene sentido desde el punto de vista científico porque el esperma tiene más tiempo para llegar al óvulo.
Sin embargo, el hecho de que haya habido un lazo copulatorio no garantiza el embarazo. Hay muchas otras razones que afectan tanto al macho como a la hembra y que pueden impedir que se produzca la fecundación.
Así que, en resumidas cuentas, un empate copulatorio es una buena señal, pero no hay garantías cuando se trata de la cría de animales.
Qué hacer con un lazo copulatorio
Éste es el único comportamiento canino ante el que no debe hacer nada. La falta de experiencia en la cría puede hacer que algunos perros se angustien durante el proceso, pero, por desgracia, no hay nada que usted pueda hacer para ayudar. Simplemente hay que dejar que la naturaleza siga su curso.
Nunca intentes separar a los perros por la fuerza, ya que esto puede causar lesiones y mucha angustia a ambos. Además, disminuye las posibilidades de éxito del embarazo. Si no quiere que su perra quede preñada, debe tomar medidas para mantenerla alejada de los machos cuando esté en celo. Una vez que la cópula está en marcha, ¡es demasiado tarde!
Observar un acoplamiento copulatorio puede resultar muy incómodo y angustioso para los propietarios de perros inexpertos, pero es esencial que mantenga la calma. Si cunde el pánico, los perros se pondrán aún más nerviosos y la situación empeorará.